jueves, 6 de mayo de 2010

Administrar la Angustia por las Inundaciones Mediante la Construcción de la Resiliencia

Los informes sobre niveles récord de las avenidas, la inundación de pueblos, o las noticias del agua rompiendo las barreras de sacos de arena o diques, son suficientes para crear la tensión y la ansiedad para cualquiera de los que viven o trabajan cerca. La anticipación de la destrucción creada por las inundaciones, pueden evocar sentimientos de preocupación, miedo, ira o incertidumbre.

Pero se pueden tomar medidas para reducir las emociones estresantes, enmedio del caos por las inundaciones, relacionadas con el fortalecimiento de la capacidad de recuperación. La Resiliencia es el proceso de adaptación en el tiempo para afrontar la adversidad, trauma, tragedia, amenazas u otras fuentes de estrés. Al fortalecer la capacidad de recuperación, se es más capaz de perseverar a través de los desafíos planteados por la inundación de nuestra casa o comunidad.

Se puede aumentar la resiliencia emocional y fortalecer el sentido de control durante esos difíciles momentos mediante los siguientes consejos:

No aislarse, sino relacionarse.
La relación con los miembros cercanos de la familia, amigos y vecinos puede ser una fuente de fortaleza y apoyo, descubriendo que no se está solo y aprendiendo de experiencias ajenas, podemos sentir una sensación de alivio.
Ayudar a los demás le puede dar una sensación de logro y la autoestima.

Evite ver las crisis como obstáculos insuperables.
No se puede detener el agua de la inundación, pero sí cambiar la forma de interpretar y responder a ellas. Trate de ver más allá de la crisis actual a la forma en el futuro las circunstancias pueden ser un poco mejor.

Deje un tiempo de escuchar las noticias.
Ver repeticiones de secuencias de inundación puede aumentar su angustia. A menudo, los medios presentan lo peor de situaciones para ganar audiencia, aunque no sea representativo.

Acepte que el cambio es parte de la vida.
Algunas metas personales o familiares ya no puede alcanzarse debido a la inundación. Aceptar las circunstancias que no se pueden cambiar puede ayudar a concentrarse en las circunstancias que puede cambiar.

Céntrese en sus metas.
Desarrollar metas realistas. Hacer algo regularmente - aunque parece un logro pequeño - permite avanzar hacia las metas.
En lugar de concentrarse en tareas que parecen inalcanzables, pregúntate:
"¿Qué cosa sé que puedo lograr hoy, y me ayuda a moverme en la dirección correcta?"

Tomar acciones decisivas.
Enlugar de apartarse por completo de los problemas y tensiones y desear que desaparezcan, aunque las inundaciones puedan arrancar de raíz a la gente de sus rutinas normales, hay que establecer nuevas rutinas tan pronto como se pueda, pues la inundación y la limpieza han terminado.

Buscar oportunidades para el auto-descubrimiento.
Las personas a menudo aprendemos algo sobre nosotros mismos y crecer en algunos aspectos personales, como resultado de la lucha contra la adversidad. Muchas personas que han experimentado tragedias y penurias han desarrollado después mejores relaciones, mayor sensación de fuerza, aumento de la sensación de valía personal, una espiritualidad más desarrollada, y aprecio por la vida.

Cultivar una visión positiva de sí mismo.
Hay que perseverar a través de circunstancias difíciles. Eso es un logro. El desarrollo de la confianza en la habilidad para resolver problemas y confiar en sus instintos, ayuda a construir la resiliencia.

Mantener los problemas en perspectiva.
Incluso cuando la perspectiva de inundación y sus desastres sean grandes, hay que considerar estas circunstancias estresantes en un contexto más amplio y una perspectiva a largo plazo. Si en el pasado se han superado dificultades abrumadoras hay que aprovechar las habilidades para superar con éxito los retos actuales.

Mantener una actitud de esperanza.
Una visión optimista permite esperar que ocurran cosas buenas en la vida: Hay que visualizar lo que se quiere, en lugar de preocuparse por lo que teme.

Cuidarse.
Participar en conductas saludables que mejoran la capacidad para sobrellevar el estrés excesivo. Paciencia en medio del caos, descanso y dieta sana. Evitar el alcohol y las drogas, ya que pueden aumentar los sentimientos de tristeza o angustia y obstaculizan el progreso en la gestión óptima de las circunstancias.

Para muchas personas, las estrategias descritas, pueden ser suficientes para superar la crisis actual. A veces, sin embargo, una persona puede tener alguna dificultad o dificultad en el manejo reacciones intensas, por lo que es importante obtener ayuda profesional .

La perseverancia y la confianza en la capacidad de superación diaria siguiendo estos consejos, serán útiles.

Fuente: Richard A. Heaps, PhD, ABPP y Suzan M. Stafford, EdD de la APA (American Psychological Association)